02 febrero 2008

Mein Führer: la intimidad del monstruo



A lo largo de los años, las personas nos damos cuenta de que las apariencias son sólo un telón que oculta lo que verdaderamente es de una persona. Adolf Hitler fue un claro ejemplo de ésto.

Uno de los mayores asesinos de todos los tiempos, Adolf Hitler, resultaba ser en su intimidad una persona modelo. Sin tener en cuenta sus alocadas ideas, el führer era una persona cariñosa con sus amistades, le encantaban los niños y los animales, odiaba la caza, era vegetariano y detestaba ferózmente que alguien fumase en su presencia. Era una persona sana y como se diría antiguamente, "forjada en las buenas costumbres". Pero todo ello era una fachada que ocultaba lo que en realidad era, una bestia mosntruosa capáz de provocar los mayores horrores que jamás haya contemplado el ser humano. Y es que, como todos sabemos, las apariencias engañan.

¿A cuantos de nosotros nos ha pasado que, por vestir de una cierta manera o hacer algo diferente a "lo normal", se nos ha mirado mal y nos han criticado? Sin embargo, la gente que critica y demoniza a la gente que es "rara", no tiene en cuenta que los peores criminales que existen van vestidos de traje. Son esos criminales los que día a día nos roban, ordenan matanzas indiscrimanadas y provocan guerras injustas en lugares remotos.
Y es que, señores, nunca se dejen engañar por las apariencias.



MORALEJA: no se puede generalizar ni estereotipar a nadie por su aspecto o por una idea precipitada, ya que puede ser quien menos el que te dé una puñalada trapera.

6 comentarios:

Traca's Snakepit dijo...

MORALEJA: no se puede generaliza ni estereotipar a nadie por su aspecto o por una idea precipitada, ya que puede ser quien menos esperas puede ser el que te dé una puñalada trapera.

Anónimo dijo...

siegheil R.I.P

Anónimo dijo...

¿y 50 millones de hombres se matan solo porque exista un monstruo?

Moraleja: no se deben buscar cabezas de turco para explicar las brutalidades que lleva haciendo el ser humano antes durante y después de la existencia de Hitler

Anónimo dijo...

Adolf Hitler, era una persona que lucho hasta su muerte por el ideal que él perseguía.

Además tan horrible fue Stalin que hizo un holocausto con las personas que no eran comunistas y mató muchisimas personas también.

88!

Anónimo dijo...

Demonizan al führer y que los sacerdotes que abusan de los niños y se creen santos y que ademas se comprueba día a día???
Adolf Hitler solo queria el bien y el desarrollo del pueblo alemán y no creo que eso sea pecado ni de considerarse bàrbaro creo que cualquier otro que realmente ame a su pueblo y gente estarà de acuerdo conmigo y especialmente con la ideologia del Tercer Reich.

Traca's Snakepit dijo...

A ver, que parece que la cosa se ha ido de madre en los comentarios: para empezar, no se está hechando la culpa únicamente a Hitler por todas las atrocidades cometidas a lo largo de la Historia de la humanidad aunque es uno de los mayores representantes de la barbarie de la Historia contemporánea. Aquí se trata de ver como una persona puede tener dos caras, una amable y ejemplar y luego otra más horrorosa. Por ejemplo, el bueno del banquero que puede ser una persona ejemplar en cuanto a su ámbito social, pero que tiene en mente quedarse con todo lo que tiene el fondo de pensiones de su banco y dejarte en bragas, por ejemplo.
Luego decir que, vale que Hitler pudiera tener sus ideales y defenderlos, pero eso no justifica que sea una persona admirable. Yo puedo querer lo mejor para mí y mi familia, y ampliar el espacio vital para ella. Entonces planeo asesinar a todos los vecinos de mi bloque y quedarme con sus pisos para ampliar el hábitat de mi familia, así se sentirán mas desahogados y amplios. Para el que defiende los ideales del Tercer Reich, Hitler buscaba el bien del pueblo alemán de raza aria. Si tu no cumples ambos requisitos, estorbas. Mira que ideales más bonitos oye.