Asiste a su propio funeral
El hombre a la izquierda de la foto, con gorra y gafas oscuras, quería ser un asistente más a su propio funeral... y su deseo fue realizado.
Ángel Pantoja apareció muerto en la ciudad puertorriqueña de San Juan bajo un puente. Como buen raperazo del gueto, quería ser tan guay como para asistir a su propio funeral. Su familia cumplió la promesa de Ángel y fue embalsamado para poder ser colocado como un asistente más en su propio funeral.
Los oficios se ofrecieron en casa de su madre, donde fue colocado de pie en una esquina del salón mientras se celebraba el funeral. En aquella esquina, Ángel Pantoja recibió el último adiós de familiares y amigos.
Y es que no se puede ser mas chuleta, no todo el mundo puede presumir de que estuvo en una esquina de una habitación presenciando su propio funeral como si no tuviera nada que ver con ello.
ACTUALIZACIÓN
Podéis ver más fotos de Ángel Pantoja disecado en este enlace.
1 comentario:
la imagen no se ve lerdaco
Publicar un comentario